LOS CUBIERTOS –
RECOSTRUCIÓN ICONOGRÁFICA
Para concluder el estudio
sobre los objetos inherentes al mundo de la cocina del siglo XII, quiero
analizar los elementos metálicos, por los quales, desafortunadamente, el
material bibliográfico encontrado es casi asente y tampoco lo de carácter
arqueológico, muy probablemente porque todo lo que era de metál venía
re-fundido para crear nuevas formas o objectos completamente diferentes. Me
gustaría dar una visión mas o menos clara utilizando las fontes iconográficas, sobretodo
las con escenas religiosas donde se miraba a pintar/esculpir los aspectos de la
realidad y de la vida común, a fin de aumentar la veracidad y la credibilidad de
la imagén, que garantía una mayor participación de los observadores.
En este siglo los
cubiertos mayormente utilizados eran los cuchillos, los que estaban en la
cocina eran diferentes y mas grandes (sobretodo si utilizados para curtar la
carne) que los posicionados sobre la mesa (del salón de los ricos), las formas
estavan diferentes pero se componían todos de una parte metálica, con
diferentes puntas, que se encajaba en el mango solitamente de madera. La
disposición de los cuchillos sobre el banquete podìa variar: a veces estavan
dos o tres, en otras situaciones cada persona tenía su personal con el cual
podía reducir los trozos de comida que venían ya curtados en cocina antes de
ponerlos sobre las bandejas; el trozo venía despues llevado a la boca con la
mano libra.
En la mayoría de las
fontes que he encontrado está rapresentado el cuchillo y raramente el tenedor, que
ya estaba en uso por los romanos y bizantinos, sobretodo estos últimos se
consideran los esparcidores de este cubierto a Venecia y en Italia del sur en
época Altomedieval (1); dos ejemplos muy interesantes son rapresentados en el manuscripto De Universo de Rabano Mauro (siglo XI,
Montecassino, Italia): en ambos se pueden ver cuchillos afilados y tenedores a
dos puntas (Im. 1-A,B); el mismo model se indivídua en el primer plano del tavolo a sigma de la Última Cena en la Pala Oro (primeros
años del siglo XII, Basilica de San Marco, Venecia, Italia), aspécto que puede
re-confirmar la influencia bizantina.
El tenedor era un objeto de los ricos,
que no podían mancharse las manos como la gente común; su lenta difusión fue
provocada da consideraciones antiguas y consolidatas, como las de Ovidio que
decía de tomar la comida en manera elegante utilizando tres dedos, o las
admoniciones de la Iglesia, que mirava a difundir un mesage de semplicidad y de
vida úmile, en la cual se dobían eliminar esplendor y comodidad para dar mayor
espacio a los buenos comportamientos (2); en la escena de la Última Cena
(folio 167R) del manuscrito Hortus
Deliciarus (1159-1175) hay un tenedor a dos puntas y dos cuchillos: uno
afilado y el otro con punta a gancho (3).
Otros testimonios del
siglo XII se encuentran en el Manuscript
Fécamp Psalter (1180, hoy a la Koninklijke Bibliotheek, Holanda) precisamente en el papel 1V con la imagén del mes
de Jenero personificado como un hombre con dos caras que están comiendo y
bebendo; sobre la mesa está un cuchillo caracterizado por un mango de madera en
el cual fue ensertada la hoja metálica con una ligera bifurcación en la parte
final. Diferentemente el papel 12V está dividido en dos escenas, en la
superior un hombre mata un cerdo con una larga hacha, miente tiene una
daga atacada al cinto; la escena sigue de bajo, de echo el hombre està
cocinando el animal sobre una plancia, todavía hay una olla con forma abierta (o
una cacerola) y una cuchilla de carnicero de grande dimensión (Im.2-A,B).
Quiero citar dos testimonios
muy interesantes de origén española donde la iconográfìa es siempre de la Última Cena: el primero (Im.3-A) es un fresco en
una boveda de la Colegiada de San Isidoro de León (1150), el segundo es de
algunos años anteriores (final siglo XI) mas de interés especial: se trata de
una placa de marfil esculpida de la Arca de San Millá de la Cogolla en el
Monastero de Yuso (La Rioja), donde, sobre la mesa, se puedon ver dos cuchillos
diferentes pero de la misma tipología que ya habemo visto en los ejemplos
precedcentes (a la izquierda es lo afilado que tiene una lieve muesa bajo la punta,
lo a la derecha tiene un cuerpo masivo con ultimación a espátula- Im.3-B).
De
origén francesa son el fresco en la Iglesia di Sany Martin a
Vic-sur-Saint-Chartier (siglo XII) con la Última Cena, mientre la Boda de Cana fue pintada en la Iglesia de St. Aignam en Brinay sur Cher
(Francia, siglo XII) .. en ambos los
cubiertos tengon las mismas formas de los modelos italianos y españoles (Im.4-A,B).
En la cocina medieval
estaban muchos objetos bién distintos y especializados para las diferentes necesidades,
logicamente no sólo los de carácter culínario; esto lo podemos entender mirando
el papel 3V del Psalter Bruegge
(siglo XII, origén belga, hoy al J. Paul Getty Museum- Im.5)(4) que, con la escena de un
hombre que se calienta muy cerca un hugar, describe la realidad cotidiana (entre
una cocina o un comedor), de echo se distinguén diferentes instrumentos
metalicos: arriba la mesa hay un cuchillo con punta de espátola y con cuerpo
convexo, a un nivel superior hay objetos que parecen pinzas (muy
probablemente útiles para el fuego).
Estamos en los siglos
donde la funcionalidad se asoció al dado extético, las cortes y las casas de
los ciudadanos de la clase media se estaban evolvendo entre canones de absoluta
elegancia y esplendor, con objetos únicos y pionieros de costumbres, que se
erigirán en los siglos siguentes.
A
B

(Im. 1)
A

B (Im. 2)
(Im. 3) A B
(Im. 4) A B

(Im. 5)
Stefania Botticchio
2) Frugoni Chiara, (2001), “Medioevo sul naso.
Occhiali, bottoni e altre invenzioni medievali”, Editori
3) El
manuscripto Hortus Deliciarum fue realizado en el monasterio de
Hodenbourg bajo la direcxión de la abadesa Herada de Landsberg el original fue victima de quemadura en la Bibliotéca
de Straburgo en el 1872, fue pero realizada una copia de todas las miniaturas en
la metad del siglo XIX